viernes, 26 de junio de 2009

Larga vida al rey



Las puertas del cielo se abren, se perdonan todos los pecados y se rinde homenaje en la tierra a la estrella del pop. No tengo mucho más que decir a parte de lo que nuestro experto, el Pato, con su velocidad radiofónoca a la hora de informar, nos ha contado.
Nunca necesite que mi abuela me dijese que soy el mejor, el más guapo y el más listo.
En estos tiempos que corren, donde las apariencias engañan gracias a los prejuicios, y dónde cada día se reduce el número de personas en quién confiar, siempre nos quedará París.

Luchando por sobrevivir a codazos en una carrera sin premio, soportaqndo las embestidas, a veces bilaterales y aguantando a las mosquitas muertas que sobrevuelan mi cabeza.

Defensor de lo justo, doy palos de ciego hiriendo a inocentes y guiandome por cantos de sirena que confunden mi percepción espacio-temporal.

Nunca me fié ni de mi mismo, y es que cuando bajas la guardia atacan. Siempre golpearé primero por lo que pueda pasar, y aunque mi decencia no me deje, encantado estaría de hundir a más de algun@ con mis propias manos hasta el fondo del mar.

Todo mi odio acumulado es sólo para conmigo, y dosificándolo en pequeñas monodosis se puede expulsar poco a poco sin hacer sangre.





Optimizaré mi vida y desecharé todo aquello por lo que no merezca la pena perder ni un ápice de mi tiempo.




Y hoy, sobretodo hoy, beberé hasta perder el control y transparente enseñare mi interior en busca de la satisfacción que me haga, o bien beber más o morir tranquilo....





Adios Michael

No hay comentarios:

Publicar un comentario